¿Qué es el pasto sintético?

El pasto sintético es un recubrimiento que puede ser utilizado para exteriores e interiores, brinda una sensación de frescura y confort que se acerca mucho a la suavidad del pasto natural.

Por ello es que se convierte en una opción duradera y de menos costo en comparación con los pastos naturales.

El pasto sintético se usa principalmente como recubrimiento de espacios exteriores e interiores. Puede ser instalado superficies duras no porosas, tierra, muros verdes y múltiples aplicaciones en acabados decorativos.

Es producto ecológico si se toma en consideración toda el agua que se ahorra al no regarlo, así como los fertilizantes e insecticidas que no se usan en su cuidado. El pasto artificial puede ser reciclado, pero no es biodegradable porque es fabricado con plásticos.

La vida útil de un pasto sintético es proporcional a la calidad y materiales con los que ha sido fabricado; sin embargo, las condiciones climáticas también son un factor importante. No obstante, la garantía de vida de los pastos sintéticos se estima entre 5 y 8 años, tanto en interiores como exteriores.

La limpieza del pasto sintético es muy sencilla y rápida, no necesita químicos especiales o labores extraordinarias. A continuación, te dejamos algunos consejos para mantener tu pasto sintético limpio en todo momento: Barre: Este primer paso te permitirá quitar la basura y polvo que se ha acumulado. Limpia: Sólo necesitas agua para deshacerte de la suciedad que puede estar en la superficie del pasto sintético, puedes apoyarte de la manguera. Te recomendamos utilizar jabón líquido, diluido en agua para asegurar una mejor limpieza. Para reducir considerablemente los olores desagradables de los desechos líquidos y sólidos de las mascotas, se sugiere utilizar vinagre blanco de alcohol de caña diluido en agua en una proporción de 1 a 10, aplicado sobre las áreas requeridas, tallando con la escoba y enjuagando finalmente con abundante agua. Seca: Puede secarse solo si lo tienes en una zona exterior, pero también puedes usar un trapo para secarlo manualmente.